Bisinvirus. Bicicletas vs crisis

Hace un año los planes cambiaron para todos en cada rincón de nuestro planeta. Nadie escapó a esta sacudida. El principal objetivo de cada uno consistió en sobrevivir y proteger a los suyos. Las prioridades dejaron de ser banalidades y la vida se puso en primer lugar. Los viajes planeados, por mas que no lo quisiéramos, tuvieron que detenerse o modificarse. Lo que imaginamos que iba a ser una crisis de un par de meses aún no se ha resuelto. Para bisinvisa fue una larga pausa en Mexico, con la suerte de contar con la ayuda de maravillosas personas que nos brindaron un lugar donde vivir por varios meses: Alejandro, Sonia, Sas y toda la gente de la RacMx. Chila, la nueva miembro de nuestro equipo viajero, se convirtió en la mejor terapeuta en los momentos dificiles y en adelante la modelo para nuestras fotografias

Llega el momento de reanudar el recorrido a pesar de las restricciones y de encontrar lugares cerrados. Tambien momento de cuestionarse si es ético seguir de turismo en una situación como ésta. Nuestra casa es la bici y con todos los cuidados decidimos movernos y visitar Teotihuacán.

¿Quién podría anticiparse a lo que venía? A las crisis les gusta a veces venir en combo, quien sabe para qué. En teoria porque necesitamos aprender alguna lección vital, pero en la práctica nos dan momentos dificiles y nos ponen a tomar decisiones. Entonces, una situación de emergencia hace regresar a Diana a Colombia. Decidir qué hacer y cómo enfrentar las difíciles situaciones nos cambia el rumbo de la vida. Llegan para sacudir nuestras bases y hacernos dar cuenta de lo que es valioso e importante. Seguir adelante en la vida es como seguir adelante en la bicicleta. Hay momentos de dar todas las fuerzas, pararse en los pedales y solo pensar en no detenerse. Hay también momentos de soltar los frenos y dejarse llevar por la bajada. Hay momentos para detenerse y decidir el camino a seguir asi como otros momentos para cambiar de ruta.

Para muchos, la crisis ha costado vidas y mucho sufrimiento y para todos ellos nuestra solidaridad. Nosotros ponemos lo posible para protegernos y also nuestros y hacer lo que consideramos mejor para que las actuales circunstancias queden como un pasado que nos enseñó a vivir priorizando a la familia, el hogar, la naturaleza y los vínculos de ayuda y amor. Aun no vemos la luz, pero a seguir con todo lo que tenemos! Ahora Leo y Chila siguen en su camino cruzando Centroamérica, contando como siempre con la infinita colaboración de quienes por el camino, dan las mejores muestras de humanidad. Las fronteras normalmente son un desafio, pero ahora los requisitos se incrementan y se dificultan. Acumulando kilómetros con rapidez, van hombre y canina cumpliendo un sueño hasta donde sea posible.

¡Nos vemos en Colombia para seguir escribiendo nuevos capitulos de bisinvisa!